Reflexión sobre la Cuarta Ola del feminismo

5 de marzo 2020

La gestación actual de la cuarta ola del feminismo es uno de los casos más polémicos que hay dentro de esta lucha, es claro – desde nuestra posición como mexicanas – que lo que la impulsa es la rebelión – como en todas las olas – y la insurrección contra la violencia sexual, como siempre, es clave el empoderamiento, dicha estrategia es un proceso individual en donde la mujer se reconoce y cuestiona todo lo que sucede (o no) alrededor de ella, una vez realizado esto se pasa al empoderamiento colectivo en donde se aúnan las subjetividades masculinas para organizar la lucha por el interés común. El cambio cultural y las políticas sociales son parte importante dentro de esta ola, en donde el acoso, la violación y la trata están al alza dentro de nuestro contexto de “desarrollo” cada vez más debilitado.

Personalmente lo que creo hace polémico el asunto de la cuarta ola, es la pregunta ¿quién es el sujeto del feminismo actual?, la filósofa Nancy Fraiser menciona que el feminismo está atrapado en una órbita de identidad, en donde rechazar las diferencias contribuye a colaborar en la opresión. Actualmente el feminismo está influenciado por agentes como las redes sociales, los noticieros, las fake news, los discursos doble moral de los políticos, la iglesia y las múltiples opiniones de unos, de unes y de unas, que muchas veces no se han tomado el tiempo para analizar las cosas con detención. Dentro de todo esto se encuentra la cuestión de la comunidad LGBTIIQ+ un espacio en donde es muy común la misoginia por parte de algunes miembres y donde la posición de algunas feministas cuestiona el si las personas trans, cuir y no binarie deberían de entrar en la lucha.

Butler es una de las pioneras en cuestionar la identidad de las personas, menciona que ésta debe de ser reconstruida. La filósofa Luisa Posada Kubissa menciona en una de sus conferencias que Butler habla del sujeto del feminismo como “Sujeto político, en donde ya no es la mujer, sino un sujeto de coalición de identidades contingentes y variables que se alían en su resistencia al orden patriarcal”; lo anterior a simple vista, es difícil de digerir y aún más de interpretar, podría decirse en palabras de Kubissa que estamos hablando de un “Postfeminismo” cuyo objetivo debería de ser la deconstrucción y reconstrucción de un nuevo ser – algo muy similar al feminismo marxista que menciona que para poder dejar de lados las dominaciones y las subordinaciones, es necesario derrocar la propiedad privada y crear nuevas mujeres y hombres -. Es necesario recodar que la diversidad del feminismo inició con las mujeres negras y chicanas que no se sentían identificadas por las palabras que decían aquellas mujeres blancas pertenecientes a una clase media – alta. Es importante mantener a la mujer como identidad estratégica: cada una es diversa tanto en lo físico como en la parte intelectual – razón por la cual hay tantas ramas de esta lucha, desde el feminismo de la ecología, el sufragista, el marxista y hasta el teológico, son multi – universos que siguen creciendo y son cada vez más estudiados – pero al mismo tiempo saben ser una cuando se les quieres anular, esto en palabras de la filósofa española Rosa María Rodríguez, quien menciona que tampoco estamos completamente preparas para la postmodernidad, somos hijas de nuestra época, la modernidad es el hoy, aun así la mujer que cuestiona y pone en duda la creencia de la otra, está ejerciendo sobre ella misma – y la otra – una violencia simbólica que surge un patriarcado, por lo tanto, sólo está replicando y no respetando.